Hacia fines de la decada del '90 comenzó a construir su carrera. "Si bien de chica me gustaba todo lo que tuviera que ver con la actuación y el modelaje, empecé a trabajar en esto medio por casualidad. Un amigo de mi papá me presentó en una agencia y a partir de ese momento no paré. A la semana de inscribirme, ya me habían llamado para hacer unas gráficas", cuenta.
Además de trabajar varios meses en París y Miami, Sofía Zamolo también protagonizó la nueva campaña de zapatos y trajes de baño de la línea juvenil Ricky, de Ricky Sarkany, que se realizó a bordo de un barco en el Tigre. Los viajes a los Estados Unidos y Europa fueron los primeros que hizo como profesional.
Ahora además de triunfar como mannequin sueña con ser diseñadora de modas y administradora de empresas.
Sofía es una persona muy creativa, le gusta el dibujo y la pintura.
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