Wanda Nara está mucho más tranquila y relajada. Y su hermana Zaira le organizó una despedida a su medida en un conocido restaurante de Puerto Madero.
“Quise prepararle una sorpresa y, aunque suene raro por tratarse de Wanda, me costó sacarla. ¡No quería hacer nada! La tuve que obligar y proponerle algo tranqui: nada de boliche ni descontrol”, reveló Zaira, su hermana menor, en diálogo con Gente.
Como disfraz, sus amigas la vistieron con un diseño de Gucci, orejitas de Playboy y un moño color rosa. “Está echa una diva. Se vino muy europea y tranquilísima”, indicó la modelo.
A la despedida acudieron algunas modelos como Florencia Salvioni, Tanya Hartfield y otras amigas e Wanda. Fueron a cenar a un restaurante en el que improvisaron una pista de baile.
“Me caso feliz porque Maxi no me pide que renuncie a nada. Obviamente me siento con más responsabilidades y le consulto decisiones pero cada uno sigue haciendo lo que le gusta. Eso es lo mejor para cualquiera pareja”, sostuvo Wanda a días de dar el paso más importante de su vida.
martes, 20 de mayo de 2008
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